Frankenstein: Diseccionando el mito (reseña)
Frankenstein. Diseccionando el mito.
Coordinado y prologado por
J.E. Álamo y Voro Luzzy
Páginas: 222
Portada: Karol Scandiu
Kelonia Editorial/ESMATER
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Mary Shelley ansiaba la inmortalidad. La autora emuló a Prometeo y arrebató la chispa divina para inocular vida a la muerte.
Ella es inmortal, Victor Frankenstein es inmortal y la Criatura, que ni siquiera mereció un nombre, es una pesadilla a la que todos volvemos una y otra vez.
Mary y Victor fallecieron hace mucho, pero la Criatura no. No puede. El fuego que prendió su vida ha pasado a otros autores; creadores de historias que retoman la figura torturada del ser repudiado. Relatos donde se perpetúa la maldición de un ser que deambula por el tiempo y el espacio sin que nadie lo libere de su destino oscuro, porque es justo lo que deseamos contemplar en nuestras pesadillas.
Bienvenidos al infierno del que no tiene nombre, contemplad su dolor y rezad para que vuestro sueño no se vea perturbado... en exceso.
Autores:
Víctor Blázquez, Carlos J. Lluch, Fernando López Guisado, Marta Junquera, David Rozas, Javier Trescuadras, José Javier Zamora, Juan Antonio Román, Laura López Alfranca, Francis Novoa, Manuel Martín, Rubén Pozo y Liliana Galvanny. Prólogo de J. E .Álamo y Voro Luzzy Epílogo de Alfonso Zamora.
Ilustradores: Karol Scandiu, CalaveraDiablo, Daniel Medina, Gema García Ingelmo, Alexis Pujol y Begoña Fumero.
Opinión:
Coger a uno de los monstruos clásicos, y ver cuantas versiones se pueden
hacer de él; vamos, diseccionar al propio mito terrorífico. Esto es lo que han
hecho los integrantes de ESMATER, de la mano de la editorial Kelonia; no sólo
literariamente, sino visualmente, a través de las reinterpretaciones de varios
ilustradores gráficos. Y, comos e ve ya en la misma portada, la imagen del
monstruo de Frankestein va a sufrir diversas remodelaciones en funciónde quien lo dibuje, pero siempre desde la
calidad asegurada.
En cuanto al tema literario, los autores no se han limitado
fundamentalmente a darle una nueva vuela al mito de Frankenstein, sino al
propio concepto como tal; es decir, al del ser formado por varias partes
diferentes entre sí, ya demás, muertas. Por eso encontramos relatos en los que
el monstruo es una entidad informática compuesta por las personalidades de tres
grandes hombres, a los que la muerte ha corrompido en sus ideales; a un cyborg con
cabeza humana y resto del cuerpo artificial, de procedencia militar; a
descendientes postapocalípticos del ser humano, única opción de la humanidad
para seguir adelante, etc.
Pero, asimismo, los relatos en los que podemos encontrar todas esta
variantes también sonde muy diversa temática, desde el terror más típico debido
al tema que se trata, a la ciencia ficción; desde el relato de acción, a la
guerrilla del Congo; desde las calles de Nápoles, a los platós de televisión de
un programa de actualidad “rosa”…
Como vemos, el “monstruo” se nos mostrará con diferentes características,
en diversas situaciones (tanto geográficas como de acción), y en diferentes
momentos. Así, como queda dicho, igual serán seres creados a partir de partes de
seres vivos y muertos como única esperanza de supervivencia de la raza humana
tras un Apocalipsis, que un programa informático con radicales ideas para con
el resto de la humanidad, que unos “descosidos” en mitad del conflicto del Congo,
que un conflicto entre las siete partes de diferentes cadáveres que componen al
monstruo, y muchas más situaciones.
También hay quien, utilizando al monstruo más clásico, lo sitúa en
diferentes ambientes y situaciones, en las que, por puro contraste, chocará su
presencia, o las acciones que se verá, digámoslo así, casi abocado a realizar
debido a su propia naturaleza.
Resumamos diciendo que cada uno en su estilo, y que a cada uno nos pueda
gustar más un enfoque que otro, la obra ha conseguido una calidad y variedad
digna de elogio; máximo cuando vemos el plantel de autores reunidos, tanto
literarios, como gráficos. En cuanto a gustos, a mí me han gustado personalmente
las más arriesgadas, las que han desarrolaldo el tema alejándose del típico
monstruo, así como las que presentan un aspecto más de ciencia ficción; las
otras también me gustaron, pero por lo arriesgado, y por gustos personales,
elijo esas que comento.
Cabe reseñar también, el doble prólogo a modo de cartas cruzadas entre el
monstruo y su “madre”, Mary Shelley, obra de los Autores J. E. Álamo y Voro
Luzzy, así como el epílogo, también a
modo de carta,d el padre de la criatura, Víctor Frankenstein, en un tono muy
diferente a las anteriores, y obra de Alfonso Zamora Llorente.
(Reseña publicada en Planetas Prohibidos)
(Reseña publicada en Planetas Prohibidos)
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