William Hope Hodgson, la voz de las profundidades – Jesús Palacios (Reseña)

William Hope Hodgson, la voz de las profundidades – Jesús Palacios (reseña publicada en Babelio)


ISBN : 8412981995
112 páginas
Editorial: Archivos Vola
(12/05/2025)
Jesús Palacios Trigo

Antes de comenzar con la reseña propiamente dicha, una advertencia; al final del libro se incluye un relato de W.H. Hodgson: ¡Leedlo antes de leer todo lo anterior dado que al hablar de algunos relatos y/o temas del autor, hay un tremendo spoiler de dicho relato! Vamos, no es que sea un spoiler, es que te cuenta prácticamente el relato. Si ya lo habéis leído y/o lo recordáis, podéis leer el libro tal como está, pero si no, mi recomendación es esa. Otras veces ha pasado que leyendo la introducción de algún libro, en especial de relatos, han contado algunas de las tramas, algún relato ha quedado totalmente explicado y, a veces, si los relatos tienen cierta continuidad, nos han destripado gran parte del libro antes de leerlo.

La reseña propiamente dicha; como su título indica, el libro va a hablar básicamente de los relatos (faceta en la que más éxito tuvo el autor) marítimos, de los que era gran conocedor por su pasado de marino. Jesús Palacios entronca ese pasado de Hodgson, en lo que considera una huída del seno materno, y una posterior vuelta al mismo al comprobar en sus propias carnes la “dureza” de la vida marina con la creación de historias en las que equipara el mar ( y por generalización, las grandes extensiones de agua asociadas al mismo... más o menos reales, más o menos ficticias y/o imaginarias) con la mujer, con la madre creadora de vida (incluso el olor del mar con el de los genitales femeninos).

Evidentemente, con el título y portada del libro ya podemos ver que la temática del mismo va a ir por ahí, dejando prácticamente de lado otras facetas del autor a las que en realidad sí se nombran, pero en la comparativa con el supuesto escaso éxito que tuvieron con las marinas. Me extraña un poco, aunque sí reconozco que estas últimas son las más reconocidas . Y, al hilo de esto, una curiosidad sobre estas historias, en las que bien pensando, estoy de acuerdo con el autor (menos cuando en cierto momento las cataloga de ciencia ficción); dichas historias son de terror/fantasía/¿ciencia ficción? materialista, no de terror (etc) sobrenatural, pues los seres y situaciones que aparecen en sus relatos aunque puede que no existan en la naturaleza, si que son de origen terrenal y, en ciertas circunstancias, ¿quizá podría llegar a ser reales? No son seres extradimensionales que quieren gobernar nuestro mundo, ni supuestos dioses de otras realidades que han hecho de nuestra dimensión su campo de batalla... no, son seres de nuestros mares, de sus incognoscibles profundidades, de islas no situadas en los mapas... en algún momento, quizá, podamos creer que son seres (y hechos) “sobrenaturales” o del más allá, puede que en algún relato nos quede alguna duda, pero en la mayoría se deben a aberraciones derivadas de seres presentes en la naturaleza.

Como digo, el autor de este libro vincula todo esto al conocimiento marítimo de Hodgson, a la dura vida que aguantó a bordo de barcos, y a los seres, situaciones, lugares, etc, que conoció. Al mismo tiempo, todo ello le llevó a una obsesión por el culturismo, del que fue gran exponente, incluso en sus estudio y enseñanza, por diferenciarse del resto, por no querer ser uno más de la “masa”. De ahí, tal vez, algunos de sus escritos donde la personalidad, la propia humanidad es absorbida y convertida en una masa amorfa donde el ser humano es indistinguible de esa propia masa... Hodgson vio, vivió, sintió, muchas cosas que luego dieron forma a sus relatos, al volver al seno materno del que en principio quiso escapar, cerrando un círculo a semejanza del mar que envuelve nuestro planeta y del que dependemos, sin poder escapar del mismo... y de lo que en él habita...